La “cacería de OVNIs” de 1997, contó con algunos participantes muy veteranos, que se cobraron piezas no poco interesantes. Uno de ellos es el ex-alcalde y Concejal del Ayuntamiento de Corera Juan Ramón Barrio, con quien nos reunimos hace pocos días para recoger personalmente sus experiencias aquella noche.
“Durante la noche del 5 al 6 de Julio -declaraba recientemente el testigo- yo estuve vigilando el cielo desde La Rioja, como tantas otras veces, y pude ver un objeto extraño, de forma circular y color anaranjado, que tenía el tamaño de media luna llena desde donde yo lo vi. Tomé mi cámara para obtener alguna prueba del avistamiento, e inmediatamente llamé a ONDA CERO para avisar de lo que había visto. Sin embargo, misteriosamente, mi cámara no pudo captar lo que yo veía en el cielo…”.
Lo que Juan Ramón Barrio ignoraba es que desde su misma zona otro testigo denunciaba haber visto un Platillo Volante.
No es extraño que cámaras fotográficas o de vídeo sean “inutilizadas” durante el transcurso de algún avistamiento. Como tampoco es extraño que los OVNIs sean avistados en las cercanías de bases o cuarteles militares, y eso exactamente es lo que ocurrió en torno a la Base Militar de Mazagón (Huelva).
Tres “cazadores” de sobrada experiencia y seriedad notificaban a nuestro equipo de expertos su experiencia. Desde un punto ubicado entre Mazagon y Matalascañas el grupo 139, liderado por Alejandro Rubio, Moises Garrido e Ignaco Garzón observaban dos luces no identificadas en el cielo sobre las instalaciones militares. Los veteranos cazadores observaron la ausencia de luces de posición de los aviones, y la trayectoria contraria a la de los satélites artificiales, por lo que no han dudado en clasificar como OVNI el objeto avistado por ellos.
Y es que entre los “cazadores” que el 5-J escrutaron los cielos se encontraban profesionales de sobrada preparación, que no se confundirían fácilmente. Muchos de ellos estaban sobradamente preparados para diferenciar fenómenos astronómicos o meteorológicos de auténticos OVNIs. Por ejemplo, desde Toro (Zamora) Peyo telefoneaba a Turno de Noche para notificar su experiencia:
“Al principios pesamos que podía ser la estrella Altares, que está en la constelación de Escorpión en dirección Noroeste… el objeto subía en diagonal hacia la izquierda. Se paró y empezó a ascender en linea recta hasta desaparecer… de Altares nada.”
“Al principios pesamos que podía ser la estrella Altares, que está en la constelación de Escorpión en dirección Noroeste… el objeto subía en diagonal hacia la izquierda. Se paró y empezó a ascender en linea recta hasta desaparecer… de Altares nada.”
Ese mismo objeto fue avistado desde el Alto de los Curas por otro grupo diferente de “cazadores”.
En Hellín (Albacete) se coordinó minuciosamente la operación del 5-J, coordinándose 4 grupos de observadores situados en puntos estratégicos de la zona. Concretamente 3 grupos en Cerro Gordo, Cerro del Pino y Carretera del Talave, y un cuarto grupo en el centro de ese triángulo, en el mismo Hellín.
Exactamente a las 02:29 varios testigos componentes del grupo 3 de Hellín avistan desde Talave un OVNI. Entre los testigos Angel Romero, Antonio Mondejar, Francisco Sánchez, Vicente Monge y Sergio Mondejar, coordinados por Jose Antonio Iniesta desde Hellín.
Inmediatamente después del avistamiento la información es analizada por otro de los “cazadores” albaceteños, Pedro Gomariz, instructor de vuelo de la compañía IBERIA, quien desestima todas las explicaciones convencionales para el incidente. Solo después de ese análisis el grupo de Hellín elaboró un informe al respecto, que inmediatamente nos envió.
Exactamente a las 02:29 varios testigos componentes del grupo 3 de Hellín avistan desde Talave un OVNI. Entre los testigos Angel Romero, Antonio Mondejar, Francisco Sánchez, Vicente Monge y Sergio Mondejar, coordinados por Jose Antonio Iniesta desde Hellín.
Inmediatamente después del avistamiento la información es analizada por otro de los “cazadores” albaceteños, Pedro Gomariz, instructor de vuelo de la compañía IBERIA, quien desestima todas las explicaciones convencionales para el incidente. Solo después de ese análisis el grupo de Hellín elaboró un informe al respecto, que inmediatamente nos envió.
Por otro lado, la espectacularidad de algunos casos, deja muy clara la imposibilidad de justificarlos con fenómenos astronómicos, aviones, etc.
Nuestra compañera Clara Tahoces, que dirigió el grupo de cazadores de San José de Valderas (Madrid) durante toda la noche, nos facilita uno de los casos más interesantes de la “cacería”, a pesar de haberse producido horas antes de iniciarse oficialmente la Alerta OVNI.
“A las 12:15 del 5 de julio -informa la Scully española- Manuel Jurado y Sonia Picón observaron, desde la Avenida de la Albufera de Madrid, un objeto blanco-metálico de unos 15 a 20 metros de longitud, con forma de cigarro puro. Según los testigos ese enorme objeto, que veían perfectamente y a pleno día, no desapareció alejándose o entre los árboles, sino que sencillamente se esfumó en el aire de golpe…”.
Sin duda Clara “Scully” Tahoces nos aporta uno de los avistamientos más espectaculares del 5-J, pero no el único.
“A las 12:15 del 5 de julio -informa la Scully española- Manuel Jurado y Sonia Picón observaron, desde la Avenida de la Albufera de Madrid, un objeto blanco-metálico de unos 15 a 20 metros de longitud, con forma de cigarro puro. Según los testigos ese enorme objeto, que veían perfectamente y a pleno día, no desapareció alejándose o entre los árboles, sino que sencillamente se esfumó en el aire de golpe…”.
Sin duda Clara “Scully” Tahoces nos aporta uno de los avistamientos más espectaculares del 5-J, pero no el único.
Ya bien entrada la noche Margarita, una joven de Madrid visiblemente impresionada, notificaba a ONDA CERO su experiencia:
“Desde luego lo que he visto yo creo que no se corresponde con nada terrestre. Ha sido una luz preciosa que ha aparecido de repente en el cielo. Era una esfera con una franja anaranjada en el centro que se dividió en dos, desplazándose en una trayectoria horizontal, pero que de repente cambió bruscamente de dirección…”.
“Desde luego lo que he visto yo creo que no se corresponde con nada terrestre. Ha sido una luz preciosa que ha aparecido de repente en el cielo. Era una esfera con una franja anaranjada en el centro que se dividió en dos, desplazándose en una trayectoria horizontal, pero que de repente cambió bruscamente de dirección…”.
En Arendil (Granada) fue observado un haz de luz saliendo de un aparato en forma de cono; desde Valdezcarai (La Rioja) se reportaba la presencia de un plato luminoso a 4 km. de altura; y desde Cataluña llegaba a afirmarse que se había producido un aterrizaje…
Una de las denuncias más controvertidas -y que despertó desconfianzas entre algunos de los ufólogos participantes- llegaba desde el mismísimo Aeropuerto de San Pablo (Sevilla):
“He visto un objeto con forma de cubo a 30 millas de la Torre de Control, a 6000 pies de altura, en el radial 240 O-SE…”.
Una de las denuncias más controvertidas -y que despertó desconfianzas entre algunos de los ufólogos participantes- llegaba desde el mismísimo Aeropuerto de San Pablo (Sevilla):
“He visto un objeto con forma de cubo a 30 millas de la Torre de Control, a 6000 pies de altura, en el radial 240 O-SE…”.
Análisis de los datos:
Partiendo de toda esta información el sociólogo Carlos J. Coloma ha realizado un minucioso examen estadístico, para el cual utilizó un banco de datos procesado mediante el Stadistics Program Social Sciences, que arroja un índice de confianza del 95% (con un error del +-2,5%).
Coloma, que no se ha limitado al estudio teórico, se desplazó hasta uno de los puntos de observación en Madrid, participando activamente en la observación nocturna del 5-J. Según declara:
“Resulta muy interesante observar la distribución horaria de los reportes OVNI, ya que la mayor concentración de llamadas denunciando avistamientos se produjo entre las 2 y 3 de la madrugada, con un 40% de los casos. Seguida de la franja comprendida entre las 3 y 4 de la madrugada (25%). Entre las 12 y 1, y entre la 1 y 2 de la madrugada se recibieron un 10% en cada hora y, curiosamente, el 15% restante de avistamientos se produjeron antes de las 12 de la noche, es decir, que los oyentes de Turno de Noche ya estaban escrutando los cielos con éxito antes de que comenzase el programa”..
Coloma, que no se ha limitado al estudio teórico, se desplazó hasta uno de los puntos de observación en Madrid, participando activamente en la observación nocturna del 5-J. Según declara:
“Resulta muy interesante observar la distribución horaria de los reportes OVNI, ya que la mayor concentración de llamadas denunciando avistamientos se produjo entre las 2 y 3 de la madrugada, con un 40% de los casos. Seguida de la franja comprendida entre las 3 y 4 de la madrugada (25%). Entre las 12 y 1, y entre la 1 y 2 de la madrugada se recibieron un 10% en cada hora y, curiosamente, el 15% restante de avistamientos se produjeron antes de las 12 de la noche, es decir, que los oyentes de Turno de Noche ya estaban escrutando los cielos con éxito antes de que comenzase el programa”..
En cuanto a la catalogación de los avistamientos OVNI reportados durante el programa Turno de Noche, fueron reunidos al menos 40 incidentes OVNI a lo largo y ancho de todo el país. De ese universo de 40 casos un 67,5% , según nuestro compañero Bruno Cardeñosa, eran pequeños objetos luminosos, de mayor o menor intensidad, en los que no podía apreciarse forma o características morfológicas (ventanillas, cúpulas, etc). Lógicamente, según Cardeñosa, muchos de esos “puntos luminosos” podían ser estrellas, planetas, etc, sin embargo en un 33% de casos (22,5% del universo total de 40 casos) esos puntos luminosos realizaban movimientos y trayectorias más o menos extrañas.
Del total de OVNIs avistados, independientemente de cual fuese su forma, un 35% eran objetos móviles en la cúpula celeste, y el 22,5% realizaban movimientos y trayectorias incomprensibles; en zig-zag; apareciendo y desapareciendo, con frenadas y aceleraciones bruscas, con cambios de trayectoria de 90º, etc.
Tras un primer análisis de los relatos recogidos por los investigadores, se ha considerado que tan solo una cuarta parte de los casos reportados podrían considerarse “inexplicables”; en un 42,5% del total de casos, los supuestos OVNIs resultaron ser planetas, cañones laser, aviones, estrellas, etc. No obstante queda un resto del 32,5% en el que, ante la falta d datos suficientes o la ambigüedad del episodio, no ha sido posible, por ahora, catalogar sólidamente los casos como “inexplicados” ni como “explicados”..
El sociólogo Carlos Coloma, en base a su análisis informático nos aporta una interesante observación:
“Metí en el ordenador los casos inexplicables y los explicables por separado, y a continuación distribuí geográficamente los avistamientos en un mapa de España, y descubrí algo muy interesante; el 40% de los avistamientos se produjeron en zonas costeras, y el 60% en zonas del interior.
Superponiendo la variable “lugar” con la variable “explicado-inexplicado”, en una operación que se denomina “Coeficiente de regresión en el cruce de variables” arroja el siguiente resultado:
Correlación de un 0.8 en cuanto a “Avistamiento en interior/explicable”, y 0.6 en cuanto a “Avistamiento costero/inexplicable”, de lo que se deduce que los testigos del interior son más proclives a confundir fenómenos naturales con OVNIS, mientras que los testigos de la costa resultan más fiables. Supongo que ello es debido a que ciertos testigos, como los marineros o pescadores, están más familiarizados con las estrellas, meteoritos, etc, que un ejecutivo de ciudad, además de disponer de cielos más limpios y por tanto campos de visión más amplios”.
“Metí en el ordenador los casos inexplicables y los explicables por separado, y a continuación distribuí geográficamente los avistamientos en un mapa de España, y descubrí algo muy interesante; el 40% de los avistamientos se produjeron en zonas costeras, y el 60% en zonas del interior.
Superponiendo la variable “lugar” con la variable “explicado-inexplicado”, en una operación que se denomina “Coeficiente de regresión en el cruce de variables” arroja el siguiente resultado:
Correlación de un 0.8 en cuanto a “Avistamiento en interior/explicable”, y 0.6 en cuanto a “Avistamiento costero/inexplicable”, de lo que se deduce que los testigos del interior son más proclives a confundir fenómenos naturales con OVNIS, mientras que los testigos de la costa resultan más fiables. Supongo que ello es debido a que ciertos testigos, como los marineros o pescadores, están más familiarizados con las estrellas, meteoritos, etc, que un ejecutivo de ciudad, además de disponer de cielos más limpios y por tanto campos de visión más amplios”.
Conclusiones
A la hora de cerrar nuestra experiencia, continua produciéndose un goteo de casos inéditos que siguen llegando a nuestro conocimiento. Además de los casos documentados durante el programa de Turno de Noche (donde se recibieron numerosas llamadas desde Andalucía, Madrid, Galicia, Canarias, Mallorca y Valencia por ese orden), se produjeron otros avistamientos; como una “bola de luz azul” avistada en Alatazar (Madrid); o la persecución de un OVNI a un coche en Retamar (Almería); o una luz observada durante dos minutos en Peñíscola (Castellón); una “esfera como la luna” moviéndose en zig-zag sobre la Sierra de Tramontana (Menorca); u otros muchos avistamientos en Navalcarnero, Cabeza de Manzaneda (Orense), Madrid, Bailén (Jaén), Motril (Granada), Melilla, Fuengirola, Fuerteventura, Gran Canaria, Cáceres, Navarra, etc, etc, etc. Sería muy largo detallar cada uno de ellos.
Sin duda, y a excepción de la macro-alerta OVNI convocada en 1992 por el programa radiofónico ESPACIO EN BLANCO, que reunió a 40.000 cazadores en las Cañadas del Teide (con la colaboración de Enrique de Vicente), la operación del 5-J ha sido la más importante en la historia de la ufología española.
Pero la “caza” no ha concluido. Cada noche nuevas piezas surcan nuestros cielos, e invitamos a nuestros lectores a que no dejen que sus armas se empolven en un armario, y continúen escrutando los cielos debidamente pertrechados de prismáticos y cámaras. Tal vez la próxima gran pieza que caiga en nuestras páginas sea cobrada por usted…
Pero la “caza” no ha concluido. Cada noche nuevas piezas surcan nuestros cielos, e invitamos a nuestros lectores a que no dejen que sus armas se empolven en un armario, y continúen escrutando los cielos debidamente pertrechados de prismáticos y cámaras. Tal vez la próxima gran pieza que caiga en nuestras páginas sea cobrada por usted…
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